Torreburu-Arrizurigane

Bueno la semana pasada no pude escribir la crónica de la vuelta a Anboto. Quedamos con Dimas e Iñigo (unos colegas de Donostia) y nos dimos la vuelta a Anboto. Es una ruta que tiene unas vistas magníficas desde Urkiola y Zabalandi. La bajada por el hayedo de Tellamendi es espectacular. La parte negativa de la ruta fue que Salva tuvo una caída tonta y se rompió el dedo meñique. Una tontería que le dejará unas semanas sin poder salir. Ahora que andaba a tope… Esta semana no tuve tiempo de nada por mis viajes. El viernes me pasó una posible ruta Pedro, que subía a Arrizurigane. Lo cierto es que tenía ganas de andar por ahí, pero la ruta bajaba a los pabellones de Erletxes y vi en Mapsource y Google Earth que había una alternativa para bajar directamente a Larrabetzu, así que se podía volver a casa por el Mortirolo. Pero esa ruta se quedaba algo escasa de kilómetros así que decidí completarla con la subida hacia Torreburu, con lo que se hace un 8, con el centro en Larrea. Resulto esta ruta que os dejo en wikiloc. Salimos pronto a las 8:30, porque tenía un compromiso en Durango a la 1 del mediodía. Vamos con manga corta porque hay previsiones de buen tiempo. El día es buenísimo para andar en bici. Vamos con ganas y buen ritmo desde el principio por San Miguel y cuando estamos llegando a la carretera que sale a Montecalvo decido parar para sacar una foto a Mugarra. Esta vista me encanta, aunque la tenga muy vista, no me canso. Vamos dirección Urrutxua y a 1 km aprox. tomamos a la izquierda por delante del Restaurante. Es un sendero muy chulo, con una subida que nos pone a tono. Lo peor es que la parte final, antes de llegar a la carretera que baja de Montecalvo, han convertido el sendero en un vertedero. Tomamos por una pista que sale en una curva a derechas, prácticamente de frente. Ahí subimos a Torreburu y bajamos a Autzagane. Seguimos bajando hacia San Bartolomé, bueno aunque antes hay una pequeña subida de las que dice Pedro que son tontunas. De Larrea vamos dirección Garaitondo y subimos a Boroa. De ahí bajamos a los pabellones y por detras de Azkar empezamos la subida a Arrizurigane, por la pista que sale a la izquierda. Es una subida de alta dificultad técnica y con grandes desniveles, que nos obliga a poner el pie en el suelo en varias ocasiones. Nos acordamos de Víctor y de Mateo, que las hubieran subido con menos problemas que nosotros. La parte final se relaja y nos permite llegar a la cima montados.

En lugar de bajar hacia la izquierda a los pabellones de Erletxes, por un camino asfaltado, bajamos a la derecha por una pista dirección Larrabetzu. Nos toca un poco de aventura. La bajada es mala. Es un mal camino destrozado por rodadas de camión y agua, con gran desnivel y muchas piedras. Ni siquiera los más técnicos la hubieran disfrutado. Lo mejor estaba por llegar, cuando estábamos en Larrabetzu, el puente que conduce a Larrabetzu estaba roto. No pasa nada lo rodeamos, porque pensamos que habrá otro puente. Vemos una solución para no mojarnos los pies pero buscamos otra alternativa un poco más segura. Después de preguntar a una chica que estaba pescando, nos confirma que sólo hay 2 posibilidades: mojarse los pies unos 30 cm. o atravesar el río por la solución que habíamos visto anteriormente. Evidentemente pasamos por aquí. Ya sólo quedaba reponer agua en Larrabetzu, no sin antes llevarnos una bronca de una señora por ir por una zona peatonal medioparados. Rellenamos los bidones y a toda pastilla para casa, porque ya eran las 11:30. Media hora más tarde estaba en casa, subimos el Mortirolo a tope. En resumen, Arrizurigane en un monte para subir muy de vez en cuando. Es una subida muy muy complicada. En la subida, vimos una pista que venía por la derecha que habrá que investigar. Otra alternativa, supongo que más sencilla, es subir desde el polígono de Erletxes.

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