El ambiente era muy bueno en la salida. Se comentaba quienes eran los que habían venido a ganar la prueba, y de hecho no estábamos entre los favoritos. La verdad es que había gente que se le veía super preparada. Salimos 142 en bici. Entre ellos no estaba Raúl, que decidió ir corriendo. Hay 3 modalidades: andando, corriendo y en bici. Cada categoría sale media hora antes en ese orden.
El crono sólo se toma en la parte de la subida. La subida tiene una pendiente prácticamente constante y acabas subiendo unos 600 metros en 8 kilómetros y medio. Digo prácticamente, porque en la zona intermedia hay un repecho importante y en la parte final está la cuesta de verdad. Las 2 veces que lo he intentado no la he subido montado. Pensaba que esta vez sí iba a poder, pero el fuerte viento que se levantó me hizo la subida más difícil y no pude con ella.
Me tomé la subida con calma guardando todas las fuerzas del mundo, sabiendo lo que me esperaba en la subida y después de la carrera, que iba a dormir muy pocas horas, como así fue. Tampoco es que hubiera podido hacer un tiempazo, pero hubiera podido mejorar algunos minutillos. Puedo decir que tengo un objetivo para el año que viene, mejorar este tiempo.
Juan durante la subida se dio cuenta de que su bici no está preparada para subir. Mientras yo subía más o menos bien, él iba haciendo un esfuerzo sobrehumano, su piñón más grande era como mi cuarto más grande. No tiene desarrollo para subir. Así que ya tiene una excusa para acelerar la compra de su bici nueva. Él ya había previsto cambiarla antes de la Talajara del año que viene.
Salva, que fue con su versión buena, hizo un gran tiempo, menos de una hora. Cada vez hay más versiones del Salva en forma y menos del Salva arrítmico, lo que es una gran noticia. Salva te queremos en plena forma. A lo mejor es psicológico y lo estás controlando… Pedro comenta que se le hizo la subida más dura que otros años y comenta que de hecho el ganador ha hecho más de 5 minutos que el año pasado.
No me gusta criticar los trazados de las pruebas, porque son lo que son, si quieres vas y si no no y punto. Pero lo cierto es que a alguien se le ha ocurrido hacer unas bajantes para el agua, con el fin de evitar que el camino se encharque, que eran un freno en la subida y un peligro en la bajada. Estaban a medio hacer y entre el hormigón de la bajante y el camino había unos boquetes que te hacían bajar de la bici en algunos de ellos. Hubo más de uno que reventó la cámara bajando. Al menos vi a muchos cambiándolas en esas zonas.
La organización me pareció muy buena y no porque en el sorteo final me tocara un jamón. Del que ya estamos dando cuenta la familia y amigos, sino porque había un gran despliegue de personal y de medios. Había personal con quads abriendo el camino, avituallamiento, ambulancia todoterreno, buena atención, etc. Un sobresaliente para los organizadores.
En general se puede decir que ha sido una experiencia muy positiva y que el año que viene si se vuelve a organizar, estaré en la octava edición. Os dejo un video de la salida. Ya sabéis más fotos en nuestra sección de Picasa y más videos en nuestro canal de youtube.
Por la pista de San Martín llegamos a la carretera de Montecalvo, tomamos hacia Urrutxua y tomamos el desvío a la izquierda por “la huesera” retomamos un pequeño tramo de la carretera de Montecalvo para tomar una pista que lleva a Torreburu. Nos desviamos por una puerta metálica a la derecha para bajar a Zugastieta por una pista muy rápida. Cruzamos la carretera de Autzagane dirección Gorozika.
Desde Gorozika dejamos Bizkargi a la izquierda y lo bordemos dirección Morga. Las vistas son espectaculares. A la derecha aparece Oiz y como voy cascado no paro a sacar fotos, de lo que me arrepiento nada más volver a casa. La ruta hasta Eskerikas y hasta el alto de Morga es un continuo rompepiernas. El resto del grupo va bien, pero yo voy, que no voy, que no he recuperado. Las piernas me han dicho basta. Toca descansar. Si el lunes fue mi peor día de spinning, incluso peor que el primero, el sábado fue mi peor salida, incluso peor que la primera. Ralentizo al grupo casi en cada subida, llego como puedo a Morga, con amagos de calambres. 
Subo a buen ritmo y al llegar arriba me encuentro con una pendiente que me supera. Eso significa que hay que entrenarse un poco más. Bajo por Berna y me había planificado una ruta de Arkotxa a San Antonio, pero el sendero está impracticable por barro y pendientes imposibles. Así que me doy la vuelta y me vuelvo por Lauaxeta y el bidegorri hasta el centro. Os dejo el perfil, se ve que la subida Arkotxa, también tiene su gracia, aunque es corta.
En Goikolejea esperamos a Salva y le preguntamos si vamos por el Mortirolo, dice que sí y subimos en grupo. Al final a Salva le quedan fuerzas para demarrar. Buenas sensaciones en general para una salida larga.
